Así se elabora LEONARDO®

PROCESO DE ALIMENTO SECO

Pocas empresas son capaces de ofrecer comida seca y húmeda de fabricación propia para gatos. Como base para la elaboración de la comida seca se utiliza tradicionalmente harina de carne y, para la comida húmeda, carne fresca. Por este motivo, ambos métodos de elaboración difieren considerablemente.

Averigüe más sobre el método LEONARDO® Thermal-Mix, único en el mundo y base de la cuidadosa elaboración del alimento para gatos LEONARDO®:

El alimento para gatos LEONARDO® solo se prepara con ingredientes seleccionados de la mejor calidad.
Para empezar, todos los ingredientes, sea carne fresca o verdura crujiente, van a la gran mezcladora.
La mezcla se cocina al vapor con especial cuidado, para conservar las vitaminas y los nutrientes lo mejor posible.
A continuación, se elaboran las croquetas del tamaño adecuado. Trabajamos con vapor que es más suave que la fricción mecánica.
Para garantizar la durabilidad del alimento seco LEONARDO® sin el uso de conservantes, lo secamos con mucho cuidado dos veces: por fuera y por dentro.
Por último, añadimos a las croquetas un aceite de alta calidad, que les da un sabor de lo más exquisito. Cada bolsa de LEONARDO® se envasa en fresco, controla y sella.

PROCESO DE ALIMENTO HÚMEDO

En nuestro centro de producción en Münsterland elaboramos tanto la comida húmeda como la seca a base de carne fresca. Preparar la carne fresca nosotros mismos nos ofrece la ventaja de tener acceso directo a los proveedores regionales. Esto nos brinda la oportunidad de ejercer un control directo sobre la calidad de la carne y de seleccionarla específicamente según nuestros altos requisitos de calidad.

Averigüe más sobre el método LEONARDO® Thermal-Mix, único en el mundo y base de la cuidadosa elaboración del alimento para gatos LEONARDO®:

El alimento para gatos LEONARDO® solo se prepara con ingredientes seleccionados de la mejor calidad.
Para empezar, todos los ingredientes, sea carne fresca o verdura crujiente, van a la gran mezcladora.
La mezcla de carne se envasa en frío en las latas.
Las latas cerradas se cuecen lentamente en una gran olla al vapor.
A continuación, las latas se etiquetan y, para mayor seguridad, se identifican con un número de lote.
De ahí parten hacia nuestros clientes de dos y de cuatro patas.